Madrid (España), 17 de septiembre de 2024 (SPS) – Los medios internacionales han revelado la tortura y los abusos de derechos humanos que sufren los migrantes marroquíes y africanos en Marruecos, donde el régimen marroquí está utilizando la emigración ilegal como una herramienta para presionar a sus vecinos europeos, particularmente a España.
El último capítulo de estos eventos se registró este domingo 15 de septiembre de 2024, cuando miles de marroquíes intentaron huir hacia Ceuta, en respuesta a las graves condiciones económicas y sociales que se viven en ese país norafricano. El fenómeno también expuso los niveles de frustración y desesperación entre la juventud marroquí, tanto masculina como femenina, que busca escapar de la pobreza y la represión en Marruecos.
Medios españoles, argelinos e incluso marroquíes, junto con las redes sociales, informaron que muchas familias marroquíes se apresuraron a la frontera cerca de Ceuta para buscar a sus hijos tras la horrenda represión contra los migrantes. El número de detenidos ha aumentado a alrededor de cinco mil, incluidos niños, menores y jóvenes adultos.
Los informes indican que las detenciones también incluyeron a muchas personas escondidas en las montañas cercanas, esperando una oportunidad para cruzar la frontera. Mientras tanto, los videos compartidos por activistas marroquíes mostraron a las fuerzas de seguridad marroquíes persiguiendo violentamente a los jóvenes migrantes y sometiéndolos a golpizas severas y tortura.
Esta violencia policial puede considerarse como parte de los intentos de Marruecos de afirmar su papel en la "protección de las fronteras europeas" a cambio de ayuda financiera de Europa, lo que plantea interrogantes sobre el compromiso de Marruecos con los estándares internacionales de derechos humanos relacionados con el tratamiento de los migrantes.
Analistas marroquíes y extranjeros sugieren que la situación actual no solo es el resultado de las crisis económicas, políticas y sociales en Marruecos, sino también una estrategia del régimen marroquí para usar la migración como una herramienta para presionar a Europa.
Los observadores creen que las grandes multitudes en la frontera pueden ser parte de una táctica de presión destinada a amenazar a España con un aumento en el número de migrantes ilegales si no se satisfacen las demandas de Marruecos.
Fuentes de derechos humanos han confirmado que Marruecos ha utilizado anteriormente el problema de la migración como una palanca en crisis pasadas, como durante el conflicto de 2022 con España sobre la recepción del presidente saharaui Brahim Ghali por razones médicas. En ese momento, Rabat utilizó el problema de la migración para obtener una postura política del gobierno español.
Esto también incluye la represión sangrienta de los migrantes africanos en junio de 2022, que resultó en la muerte de decenas de ellos mientras intentaban ingresar a la ciudad española de Melilla.
La cobertura de la prensa internacional destaca estos abusos, considerando el uso de la migración ilegal por parte de Marruecos como una forma de presión como una grave falta de respeto a los derechos humanos y una amenaza real para la estabilidad regional.
Además, es bien conocido que el Reino de Marruecos no duda en explotar "cartas" peligrosas contra sus vecinos, utilizando principalmente la migración, el tráfico de drogas, el crimen organizado y el terrorismo. Informes y testimonios impactantes de sobrevivientes y ex detenidos en prisiones marroquíes confirman que las agencias de seguridad marroquíes emplean estas tácticas para desestabilizar la seguridad y la estabilidad de muchos países vecinos. (SPS)