Álvaro Morales, Tenerife
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Martino Cuando me hablan de los saharauis, siempre me viene a la memoria, aquellos pobres pescadores canario...
Otro noviembre, otro otoño de otro año, en otro lustro y otro decenio. Pero nada. Han pasado 4 décadas y lo del Sáhara parece ya parte del panorama, como ritualizado, un problema agudo y que sensibiliza, pero irresoluble. El presidente del Parlamento de la República Árabe Saharaui Democrática, Jatri Adduh, visitó el lunes Canarias y acudió a la Cámara regional, en la que, por mucho que su causa pueda parecer ya casi ajena, dejó claro que no: una guerra, "y puede darse en cualquier momento", se traduciría en refugiados y terrorismo, afectando, sobre todo, a las Islas. Quien avisa.
Otra visita, otro acto más, pero ¿no siente ya mucha frustración el pueblo saharaui por el paso de los años y la falta de soluciones?
Sí; los saharauis sienten que han intentado ser positivos en esta trayectoria, a pesar de que fueron agredidos, invadidos, luego reprimidos y privados de su derecho a la autodeterminación. Luego, se les ha prometido celebrar un referéndum por parte de la comunidad internacional, del Consejo de Seguridad de la ONU, y se sienten frustrados, al límite, al borde de la paciencia.
¿Y qué tiene que pasar para que se desborden del todo?
Desgraciadamente, desde 2012 venimos de una situación de paralización de los buenos auspicios, del proceso de negociaciones y de arreglo político. Y vemos que, este año, los marroquíes han tomado posiciones peores, expulsando a la Minurso y vulnerando los acuerdos del alto el fuego, saliendo del muro e intentando extender su dominación a las zonas del Frente Polisario. En este sentido, no podemos hablar de esperar algo. Lo que debe pasar es que la Comunidad Internacional, la ONU, los países influyentes y el Consejo de Seguridad eviten el empeoramiento de todo.
Pero, ¿realmente pueden seguir confiando en la ONU?
No, desgraciadamente. La ONU ha demostrado su incapacidad para resolver este conflicto y sabemos por qué: porque algunos países que tienen responsabilidades como miembros permanentes en el Consejo de Seguridad, como Francia, no quieren que se solucione. Desgraciadamente, se le ha sumado España que, en vez de adoptar una postura de protagonismo en la promoción de una solución y para aplicar la resolución de la ONU, está alentando las tesis de Marruecos.
¿No esperan nada nuevo, pues, del segundo mandato de Rajoy o tienen previsto reuniones?
Esperamos por que se reestablezcan las cosas y la gobernabilidad, pero España es miembro del Consejo de Seguridad y lo presidiría en diciembre, lo que le obliga a empujar un poco porque su responsabilidad en esto le interpela.
¿Y no se rinden ante Francia? ¿Creen que cambiará algo, y más ahora, si llega la ultraderecha?
Desgraciadamente, el cambio de gobierno en España o Francia no modifican la posición del país...
Pero puede recrudecerse: ¿lo temen con una Francia de Le Pen?
Sí, pero eso conlleva un peligro que no solo amenaza a los saharauis, pues ya hay amenazas de que se retomen las hostilidades entre nosotros y los marroquíes.
Es decir, hay riesgo real de nueva guerra en nada...
Sí, sí, es que hay que subrayar que, en algunas posiciones, solo 120 metros nos separan y en cualquier momento podría estallar todo. Y eso quiere decir una generalización total de la guerra, que se extenderá a todo Marruecos, norte de África, Argelia... Nadie quedará fuera del alcance y podría desembocar en una situación similar a la de Siria o Libia...
Con refugiados...
Claro: refugiados, terrorismo y seguro que se extenderá a Marruecos y se trasladará también a España por estar tan próxima.
¿Todo se agravará con Trump o no porque, con su ultranacionalismo, obviará estos conflictos?
No lo sabemos, pero sí que los marroquíes apostaban por el éxito de Clinton, al creer que podía ser más favorable a su postura...
O sea, que, aunque retorcidamente, les ha alegrado que gane...
No, simplemente nos ha alegrado que Clinton no venga; ahora hay que ver cómo va a actuar este...
¿Cómo definiría la situación alimentaria, sanitaria, educativa... en los campos de refugiados saharauis?
El tiempo pesa y también la reducción de la ayuda financiera, material y de asistencia ha influido bastante en esos servicios y en los programas para minusválidos, tercera edad, infancia... Sobre todo, cuando la redujo España; va a ser difícil, pero hay que luchar y hago un llamamiento para que se reponga.
Con la crisis global, ¿reciben la mayor ayuda aún de España o hay otros países que se le acercan?
La ayuda de Argelia sigue igual desde hace 41 años. La de Acnur sigue y, hace dos años, se eliminó la de Canarias, pero por suerte se ha retomado este año, aunque en una cuantía muy limitada.
Aparte de la ayuda oficial, ¿qué más puede hacer el pueblo español y canario? ¿Están satisfechos con la acogida de niños y demás o podemos hacer más?
Se puede hacer mucho más con la opinión pública y al exigir políticas regionales o centrales. Además, hay que evitar que las relaciones económicas, comerciales y políticas con Marruecos no estén en detrimento del derecho del pueblo saharaui.
¿No han notado cansancio, sensación de problema irresoluble, que no cala tanto su causa...?
Se debe comprender que, en estos últimos 25 años, hemos evitado la confrontación y que haya conflicto bélico. Existe la sensación de que es un conflicto de baja intensidad porque no hay guerra ni muertos...
Pero los hubo en su día...
Y en cualquier momento puede haber y España no puede olvidar que es responsable de lo ocurrido a ojos de la comunidad internacional, pues fue la potencia colonizadora y administradora. Por eso, debe seguir en la conciencia de los españoles...
Y de los canarios, porque, si hay guerra, habrá refugiados y puede darse lo del Mediterráneo... ¿Mucha gente vendría a Canarias?
Sí, por eso digo, con franqueza y hermandad, que debe evitarse un conflicto militar pues habrá consecuencias nefastas para España y, sobre todo, muchas en Canarias...
Donde vivimos del turismo...
Sí, porque habrá también un problema terrorista y debe recordarse cómo comenzó lo de Siria...
O el mismo Irak invadido, de donde surge el Estado Islámico...
Exactamente; y ahora, que están atacando en Irak y Siria, buscan otros lugares para atacar...
En realidad, son fenómenos que se retroalimentan...
Por eso, queremos evitar un conflicto porque sabemos lo que puede pasar y eso se resuelve con la autodeterminación del Sáhara.