Fuente y foto: Costa Comunicaciones
Jira Bulahi fue designada recientemente como la primera mujer delegada del Frente Polisario en el Estado español. Nació en El Aaiún y tuvo que huir a Argelia tras la invasión marroquí durante la marcha verde. Dirigió durante diez años el Departamento de Relaciones Internacionales y Cooperación del Polisario y el sábado estuvo en San Vicente durante el 20º Aniversario de la Asociación Dajla, donde contagió toda su esperanza sobre el conflicto del Sáhara Occidental.
PREGUNTA: ¿Cómo se plantea un acto conmemorativo como este?
RESPUESTA: En estos casos realizo un repaso histórico de lo que ha supuesto la resistencia y el crecimiento del pueblo saharaui. Además homenajeamos a América de Furundarena por todo su trabajo en beneficio de una causa solidaria que ha permitido la realización de muchos sueños.
P: Mucha gente nunca ha visto un campamento saharaui. ¿Cómo son de cerca?
R: Allí cada campamento tiene escuela, dispensario, centros culturales y cada persona tiene su función. Habitan en tiendas de lona cuyo diseño ha ido mejorando para ayudar a contrarrestar los factores climáticos con temperaturas extremas que alcanzan los 50º en verano. Para ello también se realizan construcciones de adobe.
P: ¿Y cómo es el funcionamiento diario?
R: Hay una canasta básica de ayuda humanitaria, de la que se hace un reparto equitativo. Allí tienen derecho de escolarización y atención médica, evacuando los casos sanitarios no resueltos.
P: ¿Se ha avanzado mucho en estos 40 años?
R: Se han perforado tierras para habilitar pozos y ahora incluso hay plantas depuradoras del agua. Queda mucho trabajo por hacer, pero hemos avanzado mucho, mejorando la nutrición y repercutiendo favorablemente en los índices de natalidad y mortalidad.
P: ¿Cómo se imagina el futuro?
R: Siguen faltando recursos pero la cobertura de necesidades desde distintas áreas ha posibilitado un gran crecimiento. Hay gestos de bondad humana que crean vínculos y puentes indestructibles entre esta sociedad y la saharaui.
P: La Asociación Dajla permite que niños saharauis pasen el verano en San Vicente. ¿Qué le parece este proyecto?
R: Muy ambicioso. Repercute de forma positiva en los niños, que conocen elementos que sólo podían ver mediante imágenes. También les ayuda a mejorar su castellano y a consumir productos fresco favoreciendo su crecimiento. Cuando llega el momento de irse, tienen experiencia que están deseando compartir y muchas veces hasta llevan la mochila escolar llena y algún regalo a sus familias.
P: ¿No es como enseñarle un caramelo a un niño para luego quitárselo?
R: No lo creo, ellos también tienen ganas de volver llegado el momento. Además vivimos en un mundo globalizado donde ha mejorado mucho la comunicación y hay contacto regular entre los campamentos y el estado español. Hay intermediarios y se realizan vuelos solidarios que permiten que el contacto sea mucho más estrecho que hace unos años.