La repulsa al plan de autonomía marroquí para el Sáhara Occidental obedece al respeto y el contenido de las resoluciones de la ONU sobre el Sahara Occidental.
Chahid El Hafed (Campamentos de la Dignidad),20 de marzo de 2022(SPS)-. El nuevo giro de España en su política exterior a favor del plan de autonomía marroquí para el Sáhara Occidental, que no es más que la anexión por parte de Marruecos de nuestro territorio, ha suscitado rechazo, repulsa y malestar en la sociedad civil y formaciones políticas españoles porque contradice la legalidad internacional y no acata las sentenciones y resoluciones de organismos internacionales y europeos.
Este masivo rechazo a esta posición española en un nuevo rumbo en su político exterior, muestra el apoyo al derecho internacional y la libre práctica democrática por parte del pueblo saharaui de su derecho inalienable a la autodeterminación y la independencia reconocido internacionalmente.
España con su apoyo a la propuesta marroquí deja en evidencia su falta de acato a la legitimidad y el derecho internacional, frustra los esfuerzos actuales para reactivar y revitalizar el proceso de paz por parte de las Naciones Unidas y daña cualquier posible papel de España en la solución del conflicto y en la descolonización del Sáhara Occidental.
Hay que recordar a la potencia de iure que el estatus jurídico del Sahara Occidental, ha quedado patente siempre desde la resolución 1514 (XV) y todas las demás resoluciones y decisiones relativas a la descolonización como un Territorio No Autónomo pendiente de descolonización.
Hay que recordar que son numerosas las sentencias y resoluciones que diferencian al Sáhara Occidental como un territorio distinto a Marruecos, así como las que reconocen el derecho a la autodeterminación del pueblo saharaui. Estas resoluciones, han demostrado de manera contundente que la presencia marroquí en el Sahara occidental es ilegal y que no tuvo ni puede tener efectos jurídicos o políticos que mermen el derecho del pueblo saharaui a la autodeterminación e independencia.
Tanto la Resolución, RES/70/231 relativa a la Aplicación de la Declaración sobre la Concesión de la Independencia a los Países y Pueblos Coloniales, aprobada por la Asamblea General el 23 de diciembre de 2015 y la resolución 76/89 16 de diciembre de 2021, que reafirma el derecho inalienable de todos los pueblos a la libre determinación y a la independencia, de conformidad con los principios enunciados en la Carta de las Naciones Unidas y en su resolución 1514 (XV), de 14 de diciembre de 1960, refuerzan el argumento sobre la situación de la causa saharaui.
En tanto que las resoluciones RES/71/106, el 6 de diciembre de 2016
/RES/73/107, del el 7 de diciembre de 2018, la RES/74/97, 13 de diciembre de 2019 y la RES/75/106, del 10 de diciembre de 2020, reafirman la responsabilidad de las Naciones Unidas hacia el pueblo del Sáhara Occidental.
Tanto estas resoluciones como otras de la ONU, reconocen que la solución al conflicto ha de pasar por la libre determinación del pueblo saharaui.
En cuanto a la Unión Europea, las sentencias del Tribunal de Justicia de la Unión Europea del 27 de febrero de 2018 y la de 21 de diciembre de 2016, ambas sentencias importantes y relevantes, plantean sin ningún lugar a dudas, que el Sahara Occidental NO es parte de Marruecos
En ese marco jurídico, el 29 de septiembre de 2021, el Tribunal General de la UE anuló los acuerdos de asociación y de pesca entre la UE y Marruecos y confirmó que el Frente POLISARIO es el único y legítimo representante del pueblo saharaui, reconocido internacionalmente, y que goza de la independencia y responsabilidad de actuar ante el poder judicial europeo.
Esta histórica sentencia (un éxito para la justicia), refuerza las ya extendidas y sucesivas resoluciones y sentencias aprobadas y dictaminadas a favor de la cuestión saharaui y donde la mayoría reconocen el derecho del pueblo saharaui a la autodeterminación y reiteran que el Sahara Occidental y Marruecos son dos países distintos y separados.
En el continente, la RASD es uno de los estados fundadores de la Unión Africana, goza de prestigio dentro de la organización y participa en cumbres de asociación entre la UA y la UE.
España no puede ignorar tantas sentencias e ignorar la legalidad internacional y el derecho del pueblo saharaui a la autodeterminación y no puede seguir careciendo de una determinación para asumir sus responsabilidades históricas para con el pueblo saharaui.
La clase política española no ha ocultado su enfado e indignación por el cambio de posición del gobierno de Pedro Sánchez en el conflicto del Sáhara Occidental, y han califica este paso de contraposición a la posición histórica de España y a la legalidad internacional.
Es lamentable que España sigue desentendiendo de su responsabilidad para con el pueblo saharaui, continúa privilegiando sus relaciones con Marruecos, sirviendo de cómplice en los sufrimientos del pueblo saharaui, en el saqueo de sus recursos naturales y aniquilando cualquier esperanza que pueda desarticular el conflicto con una solución que permita al pueblo saharaui ejercer su derechos a la autodeterminación y la independencia.
España en vez de continuar privilegiando a Marruecos a cuesta de los derechos de un pueblo, debe ser parte de la solución y no del problema y que se abstenga de continuar evadiendo unilateralmente sus responsabilidades para con el pueblo saharaui.
El Gobierno de la República Saharaui y el Frente POLISARIO, en un comunicado difundido el viernes, han afirmado que la “posición expresada por el Gobierno español está absolutamente en contradicción con la legalidad internacional”.
El Frente POLISARIO dijo que la posición emitida por el Gobierno español carece de credibilidad, seriedad, responsabilidad y realismo y contradice la legitimidad internacional, además de que apoya y alienta la ocupación al territorio.
En declaraciones hechas por autoridades del Frente POLISARIO, el nuevo giro en la postura de España, no supone ni representa un cambio desde el punto de vista del Derecho Internacional. Tampoco incide en la situación jurídica y legal del Sahara Occidental.
Frente a estos acontecimientos, el único y solido planteamiento, es la firme resistencia y la férrea voluntad del pueblo saharaui, algo que ningún país puede doblegar.SPS/090/099