Por Lehbib Abdelhay/ ECS
Más de 9 millones de minas terrestres esparcidas por los territorios del Sáhara Occidental por el Ejército marroquí. El Sáhara Occidental se encuentra entre los diez países más minados del planeta, con todo lo que generan estas máquinas de muerte en los territorios saharauis desde hace décadas.
Expertos y observadores dicen que hay entre 7,5 a 9 millones de minas antipersona y particularmente a lo largo del "muro de la vergüenza" y la frontera con Mauritania.
La ocupación marroquí ha socavado todas las zonas. Según la ONU, una superficie de 100.000 km2 de los territorios saharauis está afectada por minas y municiones todavía sin explotar.
Estas minas siguen causando muertos y heridas muchos años después de la entrada en vigor del Plan de Arreglo auspiciado por le ONU en 1990, entre el reino de Marruecos y el Frente Polisario.
Los civiles siguen siendo las víctimas y el grupo más vulnerable frente a esas minas. Un argumento más para que el Estado marroquí coopere plenamente con la comunidad internacional.
El Frente Polisario destruyó 5.181 minas
Una ONG británica había llevado a cabo una campaña de concienciación sobre el peligro de las minas terrestres en beneficio a la población local, especialmente los nómadas. A través de estas acciones, una superficie de 49,765,987 m2 ha sido verificada en los territorios saharauis hasta 2008.
Varias organizaciones de la ONU y de los derechos humanos han pedido en numerosas ocasiones la necesidad de prestar una mayor atención a "este desastre ambiental".
Marruecos sigue negándose a firmar la convención internacionales sobre la prohibición de las minas, mientras que el Frente Polisario firmó la Convención de Ginebra en 2005.
Además de un peligro real para sus habitantes, un obstáculo muy serio para la solución al conflicto que vive el territorio del Sáhara Occidental en la actualidad