Chahid El Hafed, 21 de agosto de 2021(SPS)-. El gobierno de la República Árabe Saharaui Democrática (RASD) ha condenado en los términos más enérgicos el discurso del rey marroquí y lo ha calificado de nocivo para la estabilidad en la región.
El gobierno de la RASD en un comunicado publicado hoy, que el discurso del rey de Marruecos estuvo dominado por los efectos del escándalo de ciberespionaje en el que estaba involucrado Marruecos, y del que países vecinos, figuras políticas, periodistas y activistas, incluso algunos de sus tradicionales aliados, no han escapado de ser espiados.
El gobierno saharaui dijo que este nocivo discurso “expone la región y su seguridad a más tensiones e inestabilidad ante el regreso de la guerra en el Sáhara Occidental, que Marruecos, especialmente bajo el gobierno del actual Rey, Mohammed VI, es la principal causa de ello, ignorando así los esfuerzos de la comunidad internacional durante más de treinta años”.
El Gobierno Saharaui vuelve a recalcar con ímpetu que la política de intransigencia marroquí peligra la paz y la inestabilidad en la región y pide determinación, consistencia y medidas prácticas por parte de la comunidad internacional.
El comunicado del gobierno reafirma la determinación del Frente POLISARIO de seguir luchando por el derecho del pueblo saharaui a la autodeterminación e independencia, “y su determinación de defender sus objetivos nacionales con toda su fuerza y los sacrificios que ello requiera”
El gobierno saharaui ha condenado hace días en un comunicado difundido por su Ministerio de asuntos exteriores, la participación del Reino de Marruecos en una operación de espionaje, que ha afectado tanto a gobiernos, círculos políticos, organizaciones de la sociedad civil, medios de prensa y gente común.
La República Saharaui ha denunciado estos actos y los ha calificado de criminales por contrariar “las cartas y tratados que regulan las relaciones internacionales y a los requisitos del derecho internacional y del derecho internacional humanitario”.
Marruecos con el apoyo y el beneplácito de Francia, desde que entró como miembro de la UA ha emprendido una escalada y una desenfrenada campaña para desacreditar a la República Saharaui, miembro fundador de la organización continental.
Ha impuesto muchos obstáculos al proceso de paz. Continúa obstruyendo la legalidad internacional y dando al traste con los esfuerzos de la UA y la ONU durante todos estos años en la búsqueda de una solución que permita al pueblo saharaui ejercer su derecho a la independencia y poner fin a un conflicto de larga data que no beneficia en nada la región. SPS/090/099TRAD