Sevilla (Andalucia ), 09 de julio de 2021 (SPS)- El informe “DERECHOS HUMANOS Y EMPRESAS TRASNACIONALES EN EL SAHARA OCCIDENTAL”, elaborado por la organización MUNDUBAT, y la campaña iniciada por la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos de España (COAG) han puesto en el centro del debate político los ilegales acuerdos firmados con Marruecos, que incluyen las zonas ocupadas del Sahara Occidental y violan las firmes sentencias del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE).
El diputado de Unidad Podemos por la provincia de Sevilla en el hemiciclo regional Ismael Sánchez ha denunciado la “competencia desleal” de Marruecos con los productos agrícolas andaluces, poniendo como “ejemplo muy acabado el tomate marroquí”. “El tomate marroquí se cultiva en Dajla, un territorio ocupado por el régimen genocida de Marruecos, que luego se distribuye en camiones hasta Agadir, territorio marroquí”, ha denunciado Sanchez.
El diputado ha recordado en el pleno que "las Naciones Unidas impiden que se esquilmen los recursos naturales de los territorios ocupados. Toda la legislación internacional lo impide”.
Advirtiendo sobre el fraude en la entrada de productos saharauis al mercado europeo, Ismael Sánchez ha denunciado que “este tomate es etiquetado en Agadir como tomate marroquí, no como saharaui”. “Ahí se están vulnerando por un lado los derechos de los consumidores, porque no se les está informado de la linealidad de la etiqueta del producto que consumen. Pero tenemos otro problema con el tomate marroquí, es que hay un fraude en el cambio de etiqueta de este producto que está afectando gravemente a nuestra agricultores y agricultoras”, ha denunciado.
Por ello, el diputado ha recordado que la Junta de Andalucía tiene las competencias para que “esto no suceda", además de impedir que las provincias andaluzas sigan perdiendo áreas de cultivo ante la invasión y competencia desleal de empresas marroquíes. “En los últimos 5 años, la provincia de Almería ha perdido 2200 hectáreas de cultivo. Y más que vamos a perder en el sector hortofrutícola”, ha advertido Ismael al recordar que el Rey de Marruecos, Mohamed VI, domina un emporio en las zonas ocupadas del Sahara Occidental, que pretende ejecutar “un plan de 5000 hectáreas de cultivo” en territorio bajo ocupación militar.
En otro escenario, el eurodiputado Jordi Cañas también ha denunciado que las ilegales prácticas de Marruecos con “la venta de tomates del Sáhara Occidental camuflados como marroquíes se violan numerosas legislaciones europeas y el Acuerdo de Asociación UE‑Marruecos, que establecen que los productos que lleguen a Europa están obligados a un etiquetado que indique el origen de su producción”.
“De este modo”, añade Jordi Cañas, “al consumidor europeo le resulta imposible conocer el origen real de los productos, en una clara vulneración de las normas de etiquetado de la Unión y de los acuerdos firmados, generando además una competencia desleal con los productores europeos que está hundiendo la producción de tomate en países productores como España.
Por su parte, la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG) denunció las maniobras de la Comisión Europea para vestir de “legales” los acuerdos agrícolas con Marruecos para incluir los territorios ocupados del Sahara Occidental. La Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos de España (COAG) advierte que la “modificación unilateralmente de la Comisión Europea” se contradice con la ONU, que no reconoce la soberanía de Marruecos sobre el territorio ocupado del Sahara Occidental.
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