Alfonso Lafarga.-
“Me duele mucho la actuación del Gobierno de España y de los partidos políticos”; “dicen mucho, pero hacen poco”; “hablan a diario de temas lejanos como Palestina, pero no del Sáhara Occidental, ocupado por Marruecos por culpa de España”; “es una vergüenza que no estén con nosotros, con una causa justa, a la que no hacen caso”; “se justifican con la ayuda humanitaria, pero necesitamos actuaciones políticas”; “no lo entiendo”.
Quien así de decepcionada se expresa es Hayat Rguebi, una joven activista saharaui de El Aaiún que desde los 14 años sufre el acoso de las autoridades marroquíes –“me prohibieron mi derecho básico, ir a la escuela”- y en noviembre de 2010, con 19, padeció humillaciones, vejaciones, tortura y cárcel.
Recientemente ha estado en Salé, cerca de Rabat, para apoyar a los presos saharauis del grupo de Gdeim Izik, condenados anteriormente por un tribunal militar a penas de 20 años a cadena perpetua y ahora juzgados ante una instancia civil.
La gran decepción de Hayat, que acababa de llegar a Marruecos procedente de España, donde ha estado tres años estudiando, fue ver que entre los observadores internacionales solo había representantes de Izquierda Unida, organización a la que esta muy agradecida, y no de otros partidos, como Pode17203185_1003198703147176_956486469511727931_nmos, que considera están a favor de la causa saharaui. “Me dolió mucho, luchamos por nuestra tierra hace mas de 41 años y si estamos así es por culpa de España; quería pensar que la mayoría estaba con nosotros, pero no es verdad”.
“Sobre todo y en primer lugar –recalca en conversación telefónica desde El Aaiún- la gran responsabilidad es de España, que sigue siendo según Naciones Unidas la potencia administradora del Sáhara Occidental; el Gobierno español, con su silencio, ayuda a Marruecos, lo mismo que Francia con el derecho de veto en el Consejo de Seguridad es uno de los peores enemigos de la causa saharaui”.
Silencio informativo
Hayat, que trabaja con el grupo de periodistas “Equipe Media” contra el bloqueo informativo marroquí, lamenta la actuación de muchos medios de comunicación españoles “que mantiene un silencio muy grave sobre un lugar tan cercano para España como es el Sáhara ocupado por Marruecos, donde los saharauis luchan pacíficamente y son detenidos, torturados y encarcelados”.
“Vivimos en una zona cien por cien militar, son violados los Derechos Humanos, se reprimen las manifestaciones y pegan a las mujeres, los niños no estudian y los recursos nacionales son expoliados; pero el pueblo saharaui tiene fuerza para seguir luchando”.
El pasado 15 de abril en una manifestación en El Aaiún por la liberación de los presos de Gdeim Izik, duramente reprimida por las fuerzas marroquíes, Hayat Rguebi fue golpeada en la cabeza, igual que otras muchas mujeres que padecieron duras agresiones y precisaron atención en el hospital, donde asegura recibieron “trato vejatorio y discriminatorio”.
agression
“Nuestra lucha es pacifica y el ejército marroquí, fuertemente armado, pone en peligro la vida de las y los saharauis. Vivimos una lucha en silencio y lo que pasa aquí nadie lo sabe; los medios españoles, que informan diariamente de lo que ocurre en lugares lejanos, no se hacen eco de la lucha de un pueblo tan cercano , que habla español y que quiere recuperar un territorio que le fue arrebatado por culpa -insiste- de España”.
Es por ello que Hayat pide a las sociedades civiles organizadas de España y Francia, países socios y aliados de Marruecos, que presionen a sus gobiernos y antepongan el derecho del pueblo saharaui a recuperar su territorio por delante de cualquier otro”.
“El derecho internacional y las resoluciones de la ONU nos amparan, aunque las Naciones Unidas siguen sin mostrar interés por una solución acorde a los intereses saharauis; necesitamos mayor difusión de nuestra causa para no sentirnos solos en una ardua lucha que ansiamos acabar en victoria”.