Fuente: Desde el Atlántico / Por Carlos Ruiz Miguel
El ingreso de Marruecos en la organización continental Unión Africana (UA) a la que ya pertenece la República Saharaui (RASD) tiene una gran importancia histórica. Para calibrar la trascendencia de este hecho basta ver con lo que ANTES de este ingreso hizo el majzen de Marruecos y dijeron e hicieron sus responsables y propagandistas en relación con la posibilidad de compartir asiento con la RASD en una organización internacional. Las hemerotecas, el conocimiento del pasado, siempre nos ayudan mejor a entender el presente.
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I. RECORDATORIO ESENCIAL: MARRUECOS SE RETIRÓ DE LA OUA EN 1984 PARA NO COMPARTIR ASIENTO CON LA RASD
Para entender la importancia de la entrada de Marruecos en la UA conviene recordar el por qué Marruecos se retiró de la anterior organización continental, la Organización para la Unidad Africana (OUA).
La RASD fue admitida como miembro de la OUA en 1982 pero Marruecos amenazó a la organización si permitía que el nuevo miembro de la OUA tomara posesión de su asiento. La RASD, por prudencia, no quiso tomar asiento como muestra de voluntad para comprobar si Marruecos cumplía los solemnes compromisos que el rey de Marruecos había asumido solemnemente ante la OUA en 1983. Constatado que Marruecos no cumplió con la palabra dada, la RASD tomó posesión de su asiento en la cumbre de la OUA el 12 de noviembre de 1984. Allí estuvieron sentados juntos Marruecos y la RASD unas horas. Poco después de abierta la sesión de la cumbre de la OUA, el representante de Hassan II, Ahmed Réda Guédira, leyó un mensaje que decía simplemente que
Voilà, et je le déplore, l’heure de nous séparer. En attendant des jours plus sages, nous vous disons adieu et nous vous souhaitons bonne chance avec votre nouveau partenaire.
Traducido:
Ha llegado, y lo siento, la hora de separarnos. Esperando días más sabios, os decimos adió y os deseamos buena suerte con vuestro nuevo miembro
Tras leer esas palabras, la delegación marroquí se marchó. Estaba claro: Marruecos se retiró porque no aceptaba estar sentado en la misma organización internacional que la República Saharaui.
II. EL DISCURSO DE LOS PROPAGANDISTAS DISIMULADOS O ABIERTOS DE LA POLÍTICA DEL MAJZEN
Esta política fue avalada por los propagandistas, disimulados o abiertos, de la política expansionista marroquí, cuando la OUA fue sustituida por la UA.
Uno de los intelectuales cripto-orgánicos del majzen manifestaba, en un artículo de 4 de abril de 2009 (“Kadhafi humilie le Maroc – quelle sera la réaction marocaine?”) que Marruecos no podría formar parte de la UA mientras en la misma estuviera “el Polisario” (recte, la RASD).
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Por su parte, un conspicuo vocero del majzen en Francia, el que se hace llamar “Charles de Saint-Prot” (nacido con el nombre más prosaico de Michel André Mathieu) en un artículo más reciente, de 2014 (La diplomatie africaine du Maroc: un exemple de coopération Sud-Sud) decía que Marruecos “exige” la “expulsión” del “Polisario” para “volver” a la Unión Africana.
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Queda claro que en la propaganda del régimen se transmitía la idea de que Marruecos sólo “volvería” a la UA si el “Polisario” fuera previamente expulsado.
III. EL DISCURSO OFICIAL DEL GOBIERNO MARROQUÍ
Ese mismo año 2014, con ocasión de la 22ª cumbre de la UA, la vice-ministra de Exteriores marroquí, Mbarka Buaaida, en una entrevista expresaba nítidamente la posición oficial del régimen marroquí: no se puede plantear la entrada de Marruecos en la UA mientras el “Polisario” sea miembro.
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IV. CONCLUSIÓN: EL MAJZEN HA DEBIDO RETRACTARSE PARA QUE MARRUECOS ENTRE EN LA UA
Los textos reproducidos no dejan ningún lugar a dudas. La entrada de Marruecos en la Unión Africana supone, objetivamente, el reconocimiento del fracaso de la política exterior marroquí. Que ahora, tras ese reconocimiento, con la nueva política emprendida, el majzen pueda obtener más beneficios que costes es algo que ya se verá. Pero, en este momento, lo que no admite discusión ninguna, es que la entrada de Marruecos en la UA es el certificado del fracaso de la política exterior marroquí desde 1984. Y no porque lo diga yo. Lo dicen las palabras de los propios agentes y propagandistas del majzen.
Que ahora los propagandistas del majzen, abiertos o disimulados, quieran reescribir la historia es otra cuestión, en parte explicable por motivos psiquiátricos y en parte por motivos económicos. Pero eso es otro cuento.
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