Paris, 19/02/2014 (SPS).- El documental "Hijos de las nubes, la última colonia" - galardonado por festivales de Berlín, Toronto, San Sebastián (España) en 2012 y galardonado con el Premio Goya en 2013 como la Mejor Película Documental- de Álvaro Longoria y producida por Javier Bardem, fue presentado por primera vez este martes en Francia.
Esta película sobre el conflicto del Sáhara Occidental es como un viaje muy personal de Javier Bardem, en el que guía al espectador por el camino de la diplomacia mundial ante un problema de descolonización y revela la realidad del abandonado pueblo saharaui.
El documental, que dura una hora y 20 minutos, describe la situación de marginación política del pueblo saharaui, inmerso durante 38 años en el torbellino de la ocupación marroquí y la pasividad del gobierno español ante la ocupación de su antigua colonia por parte de Marruecos.
También aborda la lucha armada del Frente Polisario y la represión ejercida contra la población civil del Sáhara Occidental y la complicidad de EE.UU. durante la Guerra Fría, el veto sistemático de Francia ante las Naciones Unidas en contra de la aplicación de medidas que garanticen el respeto de los derechos humanos en los territorios ocupados y la falta de un referéndum para la independencia del pueblo saharaui.
Varios políticos fueron entrevistados por Javier Bardem en el documental para denunciar la situación de estancamiento en la que se ha envuelto la solución del conflicto, como la activista saharaui de derechos humanos Aminetu Haidar, el ex jefe del gobierno español, Felipe González y el ex ministro de Relaciones Exteriores francés, Jean -François Poncet y el enviado personal del Secretario General de la ONU para el Sáhara Occidental, Christopher Ross.
El documental también revela entrevistas rechazadas por el ex primer ministro español, José María Aznar, el ex Secretario General de la ONU, Kofi Annan, el ex canciller español, Miguel Ángel Moratinos, el ex presidente francés Valéry Giscard d' Estaing.
También muestra y explica los intentos fallidos de Bardem para entregar al presidente de España, Zapatero, una lista de 230.000 firmas recogidas en España a favor de la causa saharaui.
El documental muestra testimonios de niños saharauis traumatizados después de perder sus familiares asesinados por el ejército marroquí o las de activistas saharauis victimas de graves torturas por parte del ejército marroquí.
En la rueda de prensa conjunta con el director del documental Álvaro Longoria, Aminetu Haidar, y Kerry Kennedy, Presidenta del Centro Robert F. Kennedy para la Justicia y los Derechos Humanos, Javier Bardem explicó que la intención de elaborar este documental es presentar la situación de un pueblo.
"La realización de esta película nació de un deseo muy personal de entender el conflicto saharaui que se arrastra desde hace años", señaló Bardem, quien añadió que es "importante" presentar hoy este documental en Francia".
Director Álvaro Longoria a su vez indicó que el documental " debería guiarnos a todos a estar atentos para apoyar los derechos humanos no sólo en nuestro propio país, sino en todo el mundo".
Él aprovechó la oportunidad para indicar que la distribución de este documental era muy difícil de obtener en Francia debido a su posición en este conflicto, y también por la presencia de una gran comunidad marroquí que percibe este documental como "anti marroquí", cuando en realidad expone "una situación deplorable que realmente existe en el Sáhara Occidental ocupado".
Por su parte, Kerry Kennedy recordó que, todos los años, el Consejo de Seguridad de la ONU "decepciona al pueblo saharaui, al negarse a incluir el tema de los derechos humanos en el mandato de la Misión de la ONU para el Referéndum del Sáhara Occidental, MINURSO".
Aminetu Haidar llamó a la prensa francesa a "arrojar luz " sobre la situación en el Sáhara Occidental, donde "existen sistemática violación de los derechos humanos derechos por parte de Marruecos", con la esperanza de que Francia puede jugar un papel para la paz no solo en el Sáhara Occidental, sino en toda la región para "evitar una respuesta violenta por parte de las nuevas generaciones saharauis". (SPS)
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