Una ONG británica exhorta a su Gobierno que presione a Marruecos para que detenga su represión de los saharauis y permita el referéndum
Londres, 27/07/2005 (SPS) La Campaña Británica por el Sáhara Occidental (WSC- Western Sahara Campaign UK, en inglés) ha pedido a su Gobierno y a la ONU que presione a Marruecos para que permita la celebración de un referéndum libre de autodeterminación en el Sáhara Occidental, condenando "las recientes detenciones por las fuerzas de seguridad marroquíes de activistas saharauis de los Derechos Humanos", ha declarado dicha ONG en un comunicado hecho público el miércoles, del que SPS ha recibido una copia.
"La WSC pide al Gobierno del Reino Unido y a la ONU que presione a Marruecos para que respete sus obligaciones internacionales y permita la celebración de un referéndum libre sobre el estatuto del Sáhara Occidental" ; señala el comunicado.
Recuerda además que "el Reino Unido se ha sumado al resto de los miembros del Consejo de Seguridad en su aprobación del Plan Baker para resolver el contencioso" en 2003, y con ello ha tomado un compromiso internacional para ayudar en la solución del conflicto imponiendo a Marruecos el respeto de la legalidad internacional.
Por otra parte, la ONG ha indicado que existen "informes muy dignos de crédito sobre los casos de torturas y de malos tratos contra saharauis a los que las fuerzas marroquíes han detenido".
A este respecto, la Campaña ha expresado su "condena de las actuaciones recientes de las fuerzas de seguridad marroquíes con activistas saharauis de los Derechos Humanos", especialmente de Ali Salem Tamek, Aminetu Haidar y muchos otros activistas saharauis de los Derechos Humanos.
"Las detenciones continúan diariamente. Esta situación fue precedida por manifestaciones saharauis contra la persistencia de la ocupación marroquí del Sáhara Occidental, y fueron una "Intifada" saharaui no violenta", (…) "los juicios de los detenidos han estado caracterizados por la falta del procedimiento legal, la retirada de la defensa, acusaciones falsas (como la pertenencia a grupos armados, o incluso atentado contra la bandera marroquí) y penas grotescas que llegaban hasta los 20 años de cárcel. Marruecos aprovecha las manifestaciones para atacar al movimiento pacífico saharaui por los derechos civiles, que se desarrolla desde el final de los años 90", señala el texto.
La asociación indica además que "Marruecos ha cortado eficazmente al Sáhara Occidental del resto del mundo, y para este fin ha deportado o se niega a permitir el libre acceso al territorio a observadores de España o de Noruega".
Desgraciadamente, se lamenta la WSC, y "a pesar de los informes impactantes y dado que esta situación continúa aún en el territorio, no ha habido ningún eco de esos acontecimientos en la prensa británica y no se ha emprendido ninguna acción diplomática para obligar a Marruecos a responder de sus actos". (SPS)