"Regreso del infierno" de Zreignat, titula el diario espaÒol "El PeriÛdico"

El Aaiun (territorios ocupados, S·hara Occidental), 28/09/2005 (SPS) "Regreso del infierno" de Lehssen Zreignat, titulaba el martes el diario espaÒol "El PeriÛdico", cuyo enviado especial ha conseguido visitar en su casa, al ™nico escapado hasta el momento de los 37 presos polÌticos saharauis en huelga hambre desde hace cincuenta dÌas en las c·rceles marroquÌes. "Cinco semanas de huelga de hambre en la C·rcel Negra de El Aaiun lo han llevado al borde de la muerte" antes de ser liberado provisionalmente el pasado 14 de septiembre "por miedo a que muera en la c·rcel", indicaba el diario, citando a la vÌctima, que afirma querer "volver a su celda", estimando que es un "deshonor" estar libre cuando sus compaÒeros siguen en cautividad. Lehssen Zreignat fue detenido, torturado y encarcelado por haber escrito una carta de protesta a las autoridades coloniales marroquÌes contra la represiÛn y el saqueo de las casas que tuvieron lugar en mayo pasado en el barrio Mattala de El Aaiun, afirma haberse acordado "de las fotos de Abu Ghreib" al entrar en la C·rcel Negra donde fue internado, insistiendo en que "sÛlo pueden aguantar allÌ los que son fuertes o los que tienen dinero". Ha indicado que la C·rcel Negra est· "en manos de una mafia conectada con la direcciÛn de la c·rcel. Cada celda tiene su jefe y su guarda, dos presos, pagados mensualmente por el director para controlar la venta de drogas, alcohol y los espacios para dormir". "Si usted paga 2500 dirhams (el equivalente a 230 euros), que aquÌ es una fortuna, tendr· medio metro para acostarse, mientras que los que no pagan duermen en la zona de los retretes, de pie o sentados, con un olor insoportable", ha aÒadido la misma fuente. Por ™ltimo, el Sr. Zreignat relatÛ a su interlocutor el calvario de la huelga de hambre y los sufrimientos fÌsicos de los huelguistas, afirmando que estaba seguro de que nunca "saldrÌa vivo de ese infierno", a pesar de que el director de la c·rcel le ofreciÛ "la libertad y dinero" si abandonaba la huelga de hambre. En el momento actual, "como un niÒo", est· recuper·ndose lentamente con un organismo que no tolera los alimentos sÛlidos, despuÈs de haber pasado varios dÌas en el hospital, donde ha sido admitido despuÈs de varios altercados con el procurador, que querÌa hacer pagar a su familia los gastos financieros de sus cuidados. Zreignat termina esta entrevista con un llamamiento a las ONG para que intervengan en favor de los huelguistas de hambre. "Es preciso salvar la vida de esa gente", insistiÛ con "una voz que ha recobrado la firmeza", seÒala el enviado especial del diario, Josep Sauri. (SPS)