"Toda solución del conflicto del Sáhara debe ser democrática, si no, no habrá solución", dice un partido político marroquí

Rabat, 19/07/2005 (SPS) "Toda solución del conflicto del Sáhara debe imperativamente ser una solución democrática, si no, no habrá solución", ha advertido el único verdadero partido de oposición marroquí, Annahj Addimocrati, en una carta dirigida al Palacio Real en la cual declina la invitación a participar en una reunión dedicada al Sáhara Occidental, por estimar que "no ha percibido aún ningún signo que pueda probar la existencia de una voluntad política de búsqueda de una solución verdaderamente democrática a este asunto". El partido no oculta su interés en participar en un simposium de los distintos componentes políticos del país, "cuyo fin sea encontrar una solución a este conflicto" y "no la búsqueda de un nuevo aliento para la misma política de antes". A este respecto, recuerda que "durante los tres últimos decenios, el asunto del Sáhara ha sido mantenido sólo entre las manos del Palacio Real, mientras que los partidos políticos y la opinión pública no podían desempeñar ningún papel si no era el de aplaudir las decisiones tomadas". La política del Palacio consistía en "reforzar la empresa de seguridad que ha conducido a las detenciones, capturas y juicios de los que han sido víctimas varios saharauis ", señala la carta, añadiendo que esta política "no ha conseguido contener a los saharauis". Para Annahj Addimocrati, "no se trata de buscar nuevos medios para reforzar las antiguas concepciones y los viejos objetivos, sino preguntarse sobre la validez de esas mismas concepciones y objetivos en un marco de libertad, de diálogo y de franqueza consigo mismo". Sin embargo, el partido insiste en su carta, disponible en árabe en su página web, que el asunto del Sáhara Occidental resulta ser "uno de los mayores problemas a los que se enfrenta Marruecos en su vida política interna, sobre su posición en el concierto de las naciones y sus consecuencias para la situación social y económica". Desgraciadamente, este asunto iba a ser también instrumentalizado por el poder para proceder sin ser inquietado al "trucaje de las elecciones, a la formación de partidos y a la puesta en marcha del Consejo y de dirigentes una parte de los cuales está corrompida y la otra es incapaz ; lo que ha conducido al país al borde de un "paro cardíaco". " De igual forma, el puesto de Marruecos a nivel internacional ha sido largamente afectado a causa del asunto del Sáhara Occidental. Se ha visto obligado a dejar la Organización de la Unidad Africana (OUA), y a aceptar el principio de la autodeterminación a través de la organización de un referéndum bajo los auspicios de la ONU, para el cual un aceptó un alto el fuego con el Frente Polisario », recuerda el texto. "Negarle hoy al pueblo saharaui su derecho a la autodeterminación colocará a Marruecos como un país opuesto al Derecho y a la legalidad internacional", advierte. Además, el texto recuerda que el asunto del Sáhara "siempre ha constituido la piedra central del Magreb Árabe entre los dos países hermanos, Marruecos y Argelia, llegando a veces hasta a rozar el enfrentamiento militar. De forma semejante ha frenado siempre las aspiraciones de los pueblos magrebíes en la unidad ante unas circunstancias en las que las posibilidades de las pequeñas entidades para sobrevivir y desarrollarse son muy reducidas". "Visto desde el ángulo socioeconómico, el fardo de la guerra y los gastos engendrados por el armamento habrían podido ser orientados hacia la financiación del desarrollo económico y social del país. En lugar de esto, la burocracia militar ha tenido mano libre sobre los recursos haléuticos y las arenas de las playas para profundizar así la no transparencia de la economía y sembrar de intrigas el camino de la democracia", se lamenta. Annahj Addimocrati pone de relieve "el brusco" giro de la posición oficial marroquí, que después de haber aceptado el principio de solucionar el conflicto sobre la base de la autodeterminación y del plan de paz de la ONU, se cierra ahora en pedir "la búsqueda de una solución negociada aceptada por todas las partes". Señala que quienes tienen el poder han ido rápidamente a la necesidad haciendo "una lectura apresurada de la coyuntura internacional", poniendo en provecho propio las dificultades enunciadas por Kofi Annan para la aplicación del plan de la ONU, la intención de EE UU de no imponer una solución a ninguna de las partes y la llegada al poder del Partido Socialista en España, que ha contribuido a mejorar las relaciones hispano-marroquíes. Advierte que el regreso de Marruecos a la casilla de partida ha engendrado "una radicalización en los territorios ocupados del Sáhara Occidental con su lote de detenciones, de represiones y de juicios, lo que ha destruido todos los avances conseguidos hasta el presente tras la liberación de los prisioneros saharauis, como ha suscitado también las amenazas del Polisario de reemprender las operaciones militares". "Estamos convencidos de que la obstrucción ante la solución política no conducirá más que a acrecentar esta radicalización, a la reemprender los enfrentamientos militares o a la radicalización de las protestas políticas en los territorios saharauis en el seno de lo que los saharauis llaman ahora la Intifada de la independencia", advierte aún el partido. Persuadido de que el regreso a "la aproximación seguritaria" no es del interés de la lucha por la democracia al mismo tiempo que "afectará a la imagen que Marruecos intenta mostrar de sí mismo como un país que está "en vías de democratización", el partido quisiera tomar como prueba las últimas declaraciones del ministro español de Asuntos Exteriores, así como el reciente reconocimiento de la RASD por Kenia detrás de Sudáfrica. "Son indicios precursores de lo que puede aún esconder el futuro", añade el texto. Annahj Addimocrati se muestra particularmente "preocupado" por la tendencia a explotar el asunto del Sáhara "como si fuera un tema de consenso nacional" del que no está permitido salir, para reforzar un frente interno con el fin de mantener "una lucha sagrada" y "no un diálogo nacional" en torno a un asunto político de alta importancia, "pero que, como cualquier asunto político, requiere el debate". Para Annahj Addimocrati, la búsqueda de una solución al conflicto del Sáhara Occidental "no reside en absoluto en endurecer las posiciones tanto en los pasillos de la ONU como en los territorios saharauis". A este respecto, recomienda "la liberación de los saharauis detenidos durante los últimos acontecimientos, así como la instauración de un clima de libertad de expresión junto a la de mantener la independencia" del Sáhara Occidental. "El conflicto del Sáhara ha tenido repercusiones negativas sobre la evolución de la democracia en Marruecos y la ausencia de democracia no ayuda a encontrar una solución al asunto del Sáhara. Para esto pensamos que todo avance en la solución del conflicto del Sáhara requiere avanzar por el camino de la democracia. Y lo contrario es justo", señala la carta. Por último, Annahj Addimocrati estima que no ha percibido voluntad política que pudiera conducirles a adherirse a la búsqueda de una solución democrática, y por esto declina la invitación a "participar en ese consenso invocado". La Vía Democrática (Annahj Addimocrati en árabe) fue fundada en 1995 como corriente política que militaba en la legalidad. Esta formación constituye la continuación política e ideológica del Movimiento Marxista-leninista Marroquí (M.M.L.M), y especialmente de la organización Ilal Amam, que militaba en la clandestinidad desde el 30 de Agosto de 1970, como se define en su página web (http://www.annahjaddimocrati.org/index_fr.htm). (SPS)